Soy un gran fan de las viñetas gráficas, en las que con un pequeño dibujo y unas pocas palabras (breves, pero muy concisas) hace que el refrán “más vale una imagen que mil palabras” cobre una nueva dimensión.
En España hay ilustres de este género. Ejemplos los hay en cada periódico, revista, y multitud de autores independientes a lo largo de Internet. Personalmente, me gustan las viñetas que realiza El Roto, JRMora, Bernardo Vergara, Manel Fontdevilla y Forges.
En inglés, también hay unos cuantos. Suelo seguir a menudo Cyanide and Happiness y xkcd (aunque este último a veces no encuentro el sentido…), también soy un gran fan de uno de los mejores humoristas gráficos que ha habido; Nicholas Gurewitch, autor de The Perry Bible Fellowship. Humor ácido en su máxima expresión. De lo mejorcito.
Pero hoy vengo para hablar de las viñetas del New Yorker, que me ayudan a entender un poco mejor sobre cualquier cosa en un estupendo inglés. Como suele suceder en la revista digital New Yorker, en cualquiera de sus artículos se pueden encontrar viñetas sobre practicamente cualquier tema que esté de actualidad. Me gustan las viñetas del New Yorker porque también se pueden aprender expresiones comunes que no se suelen leer a menudo, aparte de su humor sarcástico e irónico.
Hace unos día se publicó en español Los libros en The New Yorker, una recopilación (traducidas al castellano, claro está) de las mejores viñetas publicadas por la revista estadounidense en su casi cien años de historia.
Y eso por eso, que me gustaría poner unas cuantas viñetas del New Yorker que he encontrado en los rincones de Internet, y que particularmente, me hacen gracia. Eso sí, en versión original :P
Espero que os guste: